Marcelo Jozami

CABA (Enviados especiales) Pablo Lázaro, presidente de la Gran Logia de la Argentina de Libres y Aceptados Masones, destacó el progresivo crecimiento que tiene la masonería argentina en todo el país, pero particularmente en Santiago del Estero.

En una entrevista exclusiva con EL LIBERAL, en su oficina central ubicada en el imponente edificio con que cuentan en Buenos Aires, habló sobre el templo que construirán en Los Flores y el convenio que firmaron con la Unse para el dictado de las denominadas Cátedras de Libre Pensamiento.

-¿Cuál es el estado actual de la masonería en la Argentina?

Hoy, felizmente, vamos a decir que hay masonería en todo el país. Somos más de 12 mil masones activos y más de 480 logias en todo el territorio nacional. Con mucha alegría decimos que en este proceso de apertura que hemos iniciado, desmitificó muchísimo y se acercó mucha gente en todo el país y en los más diversos estratos de las profesiones y de los oficios. Tenemos desde militares y policías, obreros, abogados, médicos. Es un corte de la sociedad que se nutrió, como efecto contrario, de la grieta que se propone hoy en la sociedad y en la región. Hay un trazo grueso, hay mucha gente que está cansada de no ser escuchada o de pensar que el otro le grita y que piensa que tiene la razón absoluta. Tenemos cada uno su ideología, pero nos gusta nutrirnos de la diversidad, del que piensa distinto, del que tiene una idea diferente porque entendemos que en este complemento hacemos una sociedad más fraterna para todos.

– ¿Qué lugar ocupa Santiago del Estero en ese contexto de crecimiento?

Santiago del Estero es una de las provincias que más creció desde que, en el 2010, levantamos una logia después de 80 años y hoy hay cinco logias en Santiago del Estero que están trabajando fuertemente. Es más, se está construyendo la sede propia y se está trabajando en distintas localidades como La Banda y ciudad Capital. En ese sentido, la verdad que es un ejemplo porque, incluso, uno de los dirigentes nacionales de la masonería argentina, Carlos Salido, es un oficial de Santiago del Estero. Siempre somos muy bien recibidos. Fuimos recibidos por el vicegobernador (Carlos Silva Neder). Se han declarado de interés algunas de nuestras charlas. Nosotros estamos poniéndonos siempre a disposición para trabajar. Ponemos a disposición nuestra sede para hacer un mundo mejor desde la filantropía y desde la fraternidad.

-¿Qué significado tiene el haber puesta la piedra basal, en Los Flores, en lo que será el futuro templo de la masonería en Santiago?

La piedra basal es una ceremonia antigua que se desarrolla en la masonería como tradición de los antiguos constructores de catedrales. Simbólicamente es el inicio de una etapa de construcción. Para Santiago del Estero significa que la masonería tendrá su sede provincial y habla de la importancia que tiene en este momento la provincia.

– ¿Cuánta importancia reviste para ustedes qué Santiago del Estero cuente con un templo? ¿Cuánto contribuye a la visibilización del trabajo que desarrollan?

Es muy importante porque, de hecho, es un proceso que lo medimos al revés. Que se construya un templo es el producto de un trabajo previo muy importante que hizo la zona. No es el punto final, sino que a partir de ahí comienza una nueva etapa que es, justamente, de más apertura, de dar servicio a la comunidad, es un lugar que nosotros llamamos que es el “Casa de la Ciudadanía” y no solo del masón. Y brinda solidaridad. La filantropía es la esencia de la institución.

-Ustedes firmaron un acuerdo con la Unse para el dictado de talleres.

Exactamente. La masonería, en distintas universidades nacionales, ha firmado lo que llamamos cátedras libres de libre pensamiento. La masonería como una federación de libres pensadores. El libre pensador, para el masón, lejos de lo que hoy se usa como una palabra de denostación, al contrario, hoy al libre pensador se lo considera como el raro que piensa distinto. El libre pensador es el que se auto cuestiona todas las ideas; es más, cuestiona sus convicciones más íntimas, las desafía y muchas veces las ratifica, pero por lo menos le busca un racional a todas y cada una de sus convicciones. Por lo tanto, estas cátedras de libre pensamiento, que se dan en las universidades, es usando el método masónico que fijan temas y se llevan distintas propuestas de gente que esté a favor o en contra de determinada cuestión para que uno saque una síntesis. El método masónico hace que reconoce a la razón humana como medio de investigación y las cuestiones de fe son de índole absolutamente privada familiar.

-¿Cómo evocan la figura de Bernardo Irurzun, el masón que vivió en La Banda?

Todo prohombre que nosotros sabemos de su condición de masón celebramos la vida a partir de sus obras. Siempre ponemos en la balanza las herramientas masónicas; es decir, como actúo respeto de nuestros valores que son la libertad, la igualdad y la fraternidad, de nuestro lema: “Ciencia, justicia y trabajo”. Nosotros estamos juramentados de respetar las leyes de la Nación en la que vivimos. En ese compendio, nosotros celebramos la vida de Irurzun a quien reivindicamos en la obra de las distintas logias, en este caso de las que están en Santiago del Estero.

-¿Qué atrae a la gente que se acerca a la masonería?

En general, en nuestro caso, más allá de la historia y que representamos, nosotros hemos quintuplicado la membresía en los últimos años justamente por ir en el sentido contrario de lo que se está proponiendo en la sociedad, que es nutrirnos de la diversidad. Nosotros buscamos al que piensa distinto a cada uno de nosotros. Entonces, donde hay una sociedad, partidos políticos, religiones que te proponen otra cosa o la verdad revelada o juntarte con el que piense igual que vos, nosotros somos unas de las últimas o pocas instituciones gregarias que sigue unificando al que piensa totalmente distinto.