Avanza en el Congreso la Ley de Educación Ambiental para un futuro sustentable

El Congreso Nacional trabaja sobre varios proyectos para una Ley de Educación Ambiental en todos los niveles educativos con el fin de general un nuevo paradigma social y su relación con la naturaleza.

Actualmente en el Congreso de la Nación se están tratando en comisiones dos proyectos para establecer una Ley de Educación Ambiental. Ambas fomentan el mismo objetivo: promover la sostenibilidad y fomentar un nuevo paradigma de relación con la naturaleza.

Una de las leyes fue presentada por el Poder Ejecutivo Nacional y la están trabajando en comisiones los diputados. En tanto, también ingresó en el Senado a través de un proyecto presentado por el senador por la provincia de La Pampa, Juan Carlos Marino. Ambas propuestas tienen objetivos muy similares, y en su armado participaron distintas organizaciones sociales, políticas, educativas y ambientalistas.

El 31 de octubre con la firma del presidente Alberto Fernández se giró al Congreso Nacional para su tratamiento el proyecto de Ley de Presupuestos Mínimos para la implementación de la Educación Ambiental que elaboraron en forma conjunta con el Ministerio de Educación de Nación, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, y las carteras ambientales provinciales.

“Es el momento de implementar una ley de educación ambiental que otorgue a los diversos sectores de la población herramientas, información y alternativas para el uso sostenible de los recursos naturales sin hipotecar el futuro”, subrayó Alberto Fernández en la misiva en la que solicita al Congreso la aprobación de la norma que apunta a defender la sustentabilidad como proyecto social, fomentar el desarrollo con justicia social, distribución de riqueza, igualdad de género, preservación de la naturaleza, protección sanitaria, democracia participativa y respeto por la diversidad cultural.

El ministro de Ambiente, Juan Cabandié, aseguró que “fue la sociedad la que nos demandó, a nivel institucional, poner en discusión un proyecto de ley”, y resaltó el carácter federal de la nueva norma.

En cuanto a los contenidos, el ministro de Educación, Nicolás Trotta, señaló que de aprobarse la ley, “va a modificar no solamente lo curricular sino que también va a generar ciudadanos críticos con conciencia ambiental” y eso “va a garantizar un piso de conciencia ciudadana altísima”. El 16 de noviembre pasado esta iniciativa tuvo dictamen favorable por lo que queda que sea tratada en la Cámara Baja.

Sobre el proyecto que ingresó en el Senado de la Nación fue una iniciativa plural, que estuvo impulsada por representantes de distintas Universidades Nacionales de nuestro país; la Gran Logia de la Argentina; autoridades ambientales provinciales; educadores técnicos; especialistas en cambio climático, meteorología; entre otras organizaciones sociales y ambientales.

Los detalles del proyecto

En diálogo con minutouno.com, Mariano Cravedi, secretario de Asuntos Institucionales de la Gran Logia, habló sobre el enfoque que tiene este anteproyecto y remarcó algunas diferencias que mantiene con los otros que se están trabajando. “El proyecto que nosotros impulsamos y que ingresó a través del Senador de La Pampa, Juan Carlos Marino, tiene una gran pluralidad de voces”, resaltó.

“La idea de la ley marco es crear conciencia ambiental en los distintos niveles de educación: la formal, la no formal y la informal. Pero lo que creo que distingue a este proyecto, además de está basado en la Estrategia Nacional de Educación Ambiental y en la Estrategia Nacional para la Sustentabilidad en las Universidades Argentinas, es que incluye el concepto de eco regiones. Estos territorios tienen límites diferentes a los políticos administrativos, y que los contenidos deben ser desarrollados por equipos multidisciplinario”, explicó Cravedi.

Sobre las distintas formas de educación se especifica como Educación Formal: los diseños curriculares de todos los niveles del sistema educativo; No Formal: acciones educativas desarrolladas por instituciones no incorporadas a la educación formal; y Educación Informal: a las acciones educativas desarrolladas sin estructura curricular, ni programas, ni actividades, que enseña contenidos, como formadoras de hábitos, de valores, de experiencias y habilidades, fuera de las instituciones educativas y con otros actores diferentes a los equipos docentes del sistema de educación formal.

Entre otras cosas, Cravedi señaló que se solicitó que “se tengan en cuenta las expectativas de los alumnos, para entender y poder hacer llegar mejor el conocimiento”.

Ambos proyectos que están trabajando en el Congreso, remarcan la importancia de un “abordaje holístico” que debe tener la ley.

“Este es un tema debe tener ese tipo de abordaje porque requiere una mirada integral y abarcativa, y creo que las eco regiones representa muy bien este punto. Además, es muy importante la pluralidad de voces, desde nuestro espacio promovemos el diálogo para resolver temas que son preocupantes como puede ser la minería, el punto es cómo llevarlo adelante y para eso se necesitan acuerdo. Nosotros desde la masonería proponemos el diálogo para llegar acuerdos”.

Al ser consultado sobre si hay posibilidades que la ley sea aprobada este año, el secretario de Asuntos Institucionales de la Gran Logia expresó que: “Hay bastantes probabilidades que se trate en las sesiones extraordinarias”.

“La ley conjuga dos temas centrales que son la educación y el medio ambiente, la educación es la herramienta principal del progreso”, sostuvo.

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